Monday, April 19, 2010

El costo ambiental de ampliar el Canal de Panamá, LP. Abr. 19

DEFORESTACIÓN contra COMPENSACIÓN

El costo ambiental de ampliar el Canal de Panamá

En 2006 los panameños decidieron ampliar el Canal de Panamá. Implícitamente también aprobaron la tala de 470 hectáreas de bosque.


HUELLA. En la medida que avanza el proyecto de ampliación del Canal una zona boscosa desaparece. LA PRENSA/ Gabriel Rodríguez1364149

JOSE ARCIA
jarcia@prensa.com

Con la detonación de explosivos en cerro Paraíso el 3 de septiembre de 2007 se iniciaron los trabajos de ampliación del Canal de Panamá. El hecho también marcó el inicio de la destrucción de 470 hectáreas de bosque secundario, de las cuales 332 ya sucumbieron por el paso de los tractores.

Hasta ahora, la ampliación de la vía interoceánica también ha representado la destrucción de 22 hectáreas de mangles.

El proyecto de ampliación del Canal de Panamá tiene un “costo ecológico desde el punto de vista de vegetación”, señala el Estudio de Impacto Ambiental (EIA).

“La duración del impacto será larga dado que las áreas verdes en la zona donde será removida la vegetación no se recuperarán por mucho tiempo”, señala el EIA.

Los efectos de la obra no se limitan a la devastación de bosques. El ensanche de la ruta, la construcción de las tinas de reciclaje de agua y del nuevo juego de esclusas también traen consigo la erosión de suelos y el desvío de los ríos Grande y Cocolí.

Son las consecuencias ambientales de un proyecto que fue aprobado en un referendo, de forma mayoritaria: un 76% de los panameños se manifestó a favor y 21.94% lo rechazó. En esa ocasión –22 de octubre de 2006–, 905 mil 445 panameños acudieron a las urnas, de los 2 millones 132 mil 842 habilitados para votar.

Cuatro años después y el proyecto en pleno desarrollo los ambientalista no están fiscalizando la obra. Félix Wing, director de asesoría legal del Centro de Incidencia Ambiental (Ciam), admite que no está pendiente del tema. Mir Rodríguez, director de Almanaque Azul, indicó lo mismo.

Resarcimiento

Por la tala de las 332 hectáreas de bosque secundario, la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) ha pagado $3 millones a la Autoridad Nacional del Ambiente (Anam) como compensación ecológica.

La ACP también ha desembolsado la suma de $455 mil 800 a la Autoridad de Recursos Acuáticos de Panamá (ARAP), en concepto de compensación ecológica por las 22 hectáreas de manglar afectadas en el Pacífico.

De igual forma desarrolla un programa de reforestación en parques nacionales, tanto en la ciudad capital como en el interior del país (Ver mapa).

Arizmendis Montoya y Abdiel Delgado, especialista ambiental y jefe de proyecto de reforestación de la ACP, respectivamente, son los responsables de que se cumpla con el plan de mitigación, que incluye el plan de reforestación. Además, son los encargados de garantizar que se realicen los inventarios de especies de las áreas que son devastadas.

Sobre el proceso, los especialistas explicaron que antes de iniciar el desmonte del bosque el lugar tiene que ser saneado, es decir, se realiza un inventario de los animales para su reubicación. Hasta la semana pasada se habían rescatado y reubicado 2 mil 353 animales, entre los cuales había osos perezosos, monos, culebras, armadillos, iguanas, caimanes y puercoespines.

Hasta la fecha se han reforestado 450 hectáreas, mientras que otras 65 serán reforestadas en lo que resta del año, para completar 515, aseguró Montoya.

Delgado, por su parte, dijo que esta semana se debe abrir la licitación para la reforestación por la afectación de la zona de manglar. Precisó que en coordinación con la ARAP se escogió la desembocadura del río Chiriquí Viejo, en Chiriquí.

Dificultades

En cuanto a las áreas donde se realizarán las reforestaciones por las zonas de bosque afectadas, los funcionarios explicaron que la Anam es la que decide en qué lugar se harán.

En este proceso han tenido algunas dificultades.

Delgado explicó que este año suspendieron un proyecto de reforestación en La Yeguada, provincia de Veraguas, por problemas de tenencia de tierra.

Es importante, comentó, que la reforestación se realice en zonas que no presenten conflictos territoriales, para garantizar el proyecto. Ahora, comentó, la Anam debe ubicar otro lugar para completar la cantidad de terreno que se debe reforestar por las 332 hectáreas que hasta la fecha han sido devastadas. El compromiso es reforestar el doble de lo que se destruye y con una especie nativa, enfatizó.


ENFOQUE

No hay fiscalización ciudadana

MIR RODRÍGUEZ*
panorama@prensa.com

OPINIÓN. El resultado del referendo demuestra que a pesar de toda la plata que gastó el Estado en propaganda patriotera, la mayoría de los panameños no sentimos vinculación ni compromiso con el Canal. Pero al ganar el sí los sectores anti expansión quedamos desarticulados: el referendo le calló la boca a los ambientalistas. Pareciera que tras esa consulta los ecologistas ya dimos por perdido ese caso y nos estamos concentrando en atender el asalto sin los precedentes que están sufriendo los ecosistemas de Panamá en los últimos años.

Pero, las razones por las que hicimos campaña por el no a la ampliación siguen vigentes. Al final, las minas a cielo abierto y las hidroeléctricas gigantes forman parte de la misma lógica desarrollista, irracional y elitista de la expansión del Canal, una fórmula que ha contribuido en buena medida a producir las enormes desigualdades de este país.

*Almanaque Azul

1 comment:

Dejavu Panama said...

Si al menos reforestaramos el doble o triple del daño que causamos pero no!, es una pena como acabamos con el medio ambiente.